Elegir qué estudiar significa
tener presente el interés que tengas por un campo profesional, el grado de
disfrute que te produzca conocer, estudiar o imaginarte desempeñando esa
profesión. Esto es muy importante pero lo es más la posibilidad de que esa
profesión sea realmente eso, tu futura profesión y no se convierta en una
ilusión frustrada. Quiero decir que si lo que de verdad te interesa no tiene
salidas profesionales en la actualidad ni en una proyección de futuro ¿no sería
mejor que pensaras en ello como una afición?
Pensar en qué estudiar no solo
significa intentar decidir qué te hace feliz sino también qué utilidad tendrá
la decisión que tomes. No se trata de
abandonar la idea romántica de la vocación pero si decidir con los pies en la
tierra, elegir aquello que te permita desempeñar una profesión. No se trata de
obtener un título y ya veremos… sino de pensar en términos prácticos. Por ello,
¿es importante conocer las salidas profesionales? ¿Las posibilidades de
empleo? No cabe duda de que sí. El País nos ofrece esta semana un análisis
sobre empleo y estudios que te animo a ver Aquí.
